Mario de León Díaz, un joven cubano sin antecedentes penales que había sido detenido por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) y enfrentaba la amenaza de deportación a Cuba, ha sido liberado. Portador de un I-220B, Mario finalmente puede respirar tranquilo.

Su esposa, Marien, compartió su alivio con Telemundo 51: «Me llamó y me dijo que lo iban a soltar, que lo iban a soltar.» Durante semanas, Marien vivió con el temor constante por el futuro de su esposo y su familia.

La liberación de Mario ha transformado por completo la vida de Marien. «Automáticamente mi vida ha cambiado, porque tener una familia unida es lo más importante,» expresó emocionada. Ahora, Mario ya no tendrá que presentarse a las citas de inmigración, un alivio inmenso para la pareja, especialmente porque Marien está embarazada de cuatro meses.

El pasado martes, Mario de León Díaz, de 26 años, enfrentaba una orden de deportación debido a que no había pasado la entrevista de miedo creíble al solicitar asilo político en la frontera sur de Estados Unidos.

El abogado de Mario, Eduardo Soto, presentó una demanda solicitando una Parole de emergencia, destacando la delicada situación de su esposa embarazada. Los esfuerzos legales, junto con la presión pública, resultaron en la liberación de Mario.

«Se cumplió lo que pediste,» le dijo el abogado Eduardo Soto a Marien, recordándole la importancia de la perseverancia y la esperanza. La familia, ahora unida, puede mirar al futuro con renovada esperanza y fortaleza.