Celia Cruz, nacida en la ciudad de La Habana, Cuba, en 1942, fue una cantante y artista icónica en el mundo de la música latina. Desde una edad temprana, destacó por su talento musical y se convirtió en una figura emblemática de la salsa, siendo conocida como la «Reina de la Salsa».
Inició su carrera como parte de la famosa agrupación «La Sonora Matancera» y posteriormente se radicó en Estados Unidos en 1959, debido a la llegada al poder de Fidel Castro en Cuba. A lo largo de su carrera musical, obtuvo más de veintitrés discos de oro y recibió cinco premios Grammy, consolidándose como una de las mejores intérpretes de música latina del siglo XX y de todos los tiempos en América Latina.
Además de su talento vocal, Celia Cruz era conocida por su estilo extravagante y su forma única de vestir, que incluía el uso de pelucas coloridas. A lo largo de su carrera, utilizó pelucas como parte de su imagen artística, lo que se convirtió en uno de sus sellos distintivos.
Uno de los momentos más icónicos de su vestimenta extravagante fue durante su presentación en los Latin Grammy de 2002, donde lució un vestido largo azul con una peluca en blanco y azul, que complementaba su sabor afrocaribeño y demostraba su carisma en el escenario.
Lamentablemente, Celia Cruz falleció en 2003 en la ciudad de Fort Lee, Estado de Nueva Jersey, Estados Unidos, debido a un cáncer cerebral. Su legado musical y su estilo extravagante la convierten en una leyenda de la música latina que sigue siendo recordada y admirada por millones de personas en todo el mundo.