Vanessa Alfonso Lupianez, una valiente niña originaria de Cuba, encontró una segunda oportunidad de vida en Estados Unidos. Hace un año, enfrentando un diagnóstico de cáncer de riñón que, en su tierra natal, se consideraba irreversible, Vanessa llegó a suelo estadounidense gracias a una visa humanitaria.
La congresista cubanoamericana, María Elvira Salazar, fue fundamental en este proceso. A través de su gestión, no solo se garantizó la entrada de Vanessa, sino también la de su familia. «Hace un año, tuvimos la fortuna de apoyar a Vanessa al facilitarle una visa humanitaria para que recibiera tratamiento por su cáncer. Lo que en su país se veía como un callejón sin salida, aquí se convirtió en esperanza y recuperación. Es un honor poder hacer una diferencia en la vida de personas como Vanessa desde mi cargo en el Congreso. Las luchas y desafíos que enfrentamos en DC encuentran su recompensa en historias como esta», compartió emocionada Salazar en sus redes sociales.
A la niña Vanessa le ayudamos un año atrás con una “visa humanitaria” para que se tratara el cáncer. En Cuba le dijeron que no tenía solución. Hoy Vanessa está sana.
Por cosas como esta estoy orgullosa de ser Congresista. Los sacrificios en DC se vuelven rosas. ¡Gloria a Dios! pic.twitter.com/H01Bktld5I
— María Elvira Salazar ???????? (@MaElviraSalazar) September 9, 2023
El Nicklaus Children’s Hospital en Miami-Dade fue el recinto que acogió y atendió a Vanessa durante su tratamiento. El equipo médico y las avanzadas tecnologías de este hospital lograron lo que en Cuba parecía imposible: la recuperación total de la joven.
Y no todo ha sido lucha y desafío para Vanessa. Recientemente, tuvo el alegre encuentro con la cantante Karol G durante un concierto en Miami, momento que los fans no dudaron en compartir y celebrar en las redes sociales.
Las historias como la de Vanessa nos recuerdan la importancia de la solidaridad, el amor y la esperanza en tiempos difíciles.